jueves, 9 de julio de 2009

REFLEJO EN UN CHARCO

A veces imagino
un vientre que me espera,
en un mundo que ha depuesto

sus afiladas trampas.
Descontando las derrotas,
precisas, definitivas,
los besos que no me dieron
y los hijos que no parí,
al final quedan mis huellas

pisando mapas extraños,
continentes ajenos

que transité como propios.
Por las noches sueño
en una herencia liviana
y que alguien me convoca
a un amor inocuo.

20 comentarios:

iliamehoy dijo...

me gustan tus palabras, y los mundos que encierran cada una de ellas...
eso si,que el amor te sea inouco, pero no insípido....
Una sonrisa

Sinuosa dijo...

Aysss..., cómo me gustaría tener esa facilidad poética que tan bien manejas.
Una delicia leerte.

Raúl dijo...

Un poema doloroso, de esos en los que es imposible que se filtre la esperanza. No hay resquicio alguno para ello.

BB dijo...

Me gustan tus versos, siempre
profundos, llenos de crípticos
mensajes. Es triste soñar con
amores inocuos. Es, algo así,
como desperdiciar ese sueño.
Hay desesperanza en lo que
escribes, hoy.
Un beso
BB

Miguel Baquero dijo...

Si descontáramos nuestras derrotas, igual nos quedábamos en nada...
Precioso el poema

Jaht dijo...

El sueño, efectivamente, es el mundo en que viven los amores inocuos por eso se evaporan al venir el día.

Anónimo dijo...

¿Existe un amor inocuo??
Ay, querida , me ha gustado mucho este reflejo.

strongboli dijo...

No creo que hayan amores inocuos. Cuando se convierten en eso dejan de ser amores y pasan a ser otra cosa: monotonía, tedio, rutina, vacío... Sobretodo vacío.

Josué Ramón Ascencio dijo...

porque sera???, es lo que deseas para ti???

ANTONIO SERRANO CUETO dijo...

Querida Araceli, he sabido por casualidad (por el blog de F. Valls) que tienes en puertas un libro de microrrelatos. Aprovecho la noticia para felicitarte y anunciarte que seré uno de sus primeros lectores, por lo que te ruego que me informes cuando sea impreso. Un beso desde la otra orilla del Mediterráneo.

BB dijo...

Araceli: Y desde esta otra orilla
del Atlántico, te felicito y
quisiera también contarme entre
esos primeros lectores.
Un fuerte abrazo
BB

Araceli Esteves dijo...

ILIAMEHOY
Un amor inócuo es un oxímoron (vaya palabreja, parece un insulto) como "hielo caliente".
Nada que hacer: o es amor o es inocuo.
SINUOSA,
¿facilidad poética? Gracias,ya la quisiera para mí. Y más en verano,temporada en la que las musas toman más días de vacaciones.
RAÚL,
Es cierto que hay dolor. Para mí, toda la poesía que escribo nace de un sufrimiento, aunque a veces tenga una apariencia inocua.

Araceli Esteves dijo...

BB, hay tristeza y desesperanza, eso es algo intrínseco en mi poesía. Nunca he sabido escribir poemas alegres.Me alegro de que te gusten.

Sí que es verdad MIGUEL, las derrotas marcan más que los éxitos.

REYES, como he escrito más arriba, lo del amor inocuo es un oximoron como una casa.

STRONG, un amor vacío no es un amor por mucho que algunos se empeñen en llamarlo así.

JOSE RAMON, la verdad es que no, un amor inocuo no conduce a nada.

Araceli Esteves dijo...

ANTONIO y BB, lo del libro es posible pero no seguro ( nada lo és) pero si sale os enterareis.
Besos

Araceli Esteves dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EL SUEÑO DE GENJI dijo...

Me quedo con lo de las huellas pisando mapas extraños...continentes ajenos que transité como propios."

Experimentar lo nuestro y lo ajeno, lo blanco y lo negro. Caminar en los zapatos de otros y ver que el mundo lejos de ser grande es pequeño...De valores eternos y verdaderos cargados sus fardos. No hay continentes ajenos ni extraños. Son todos cercanos. Nosotros somos los que creamos las vallas.

Enhorabuena - si se puede decir - por ese libro¡¡¡

Saludos

Sergio Astorga dijo...

Araceli, sueño de tan sutil que me gustaría tener esa herencia, así sería el pasado si me esperara.
Un abrazo.
Sergio Astorga

Araceli Esteves dijo...

SUEÑO DE...
Algunas cosas, de tan conocidas nos resultan ajenas.Las aceptamos por inercia, sin que tengan nada que ver con nosotros.
SERGIO
Bienvenido.Las herencias no se eligen, caen a veces como pesados fardos.

NáN dijo...

Es un poema redondo, Araceli, sabes que no lo diría de no sentirlo así. Si tuviera que describirlo en una presentación, hablaría de una voz que se expresa con sencillez, sobre un fondo de tristeza, y que destaca por la elegancia.

(cruzo los dedos para que salga ese libro, porque quiero leerlo).

Un abrazo (y mi total acuerdo con Miguel Baquero).

Araceli Esteves dijo...

Muchas gracias NáN, me alegro de que lo veas así. Lo has descrito de una forma tan benevolente que me has llegado a emocionar. Yo también espero que salga el libro y desde luego os tendré informados.
Te devuelvo el abrazo multiplicado.