sábado, 23 de marzo de 2013

Y LLEGÓ LA CIGÜEÑA

Y  todos empiezan a buscarle parecidos, que si se parece al manual de funcionamiento del termo de la casa en la que vivió Cortazar en Paris, que si guiña las erres como el Diccionario de María Moliner, que si la textura de la portada es la misma, igualita, dicen, que la suela de las zapatillas que llevaba Onetti.
El caso es que ya está en casa, y fueron muchas las comadronas que ayudaron en el parto. Gracias a todas y a todos. También a los que en algún momento habéis pasado por este blog. Sin visitas ni comentarios nunca me hubiera atrevido a pensar en publicar.
Os alegrará saber que no llora por las noches, pero yo me despierto igual para arroparle porque las noches húmedas de primavera son muy traicioneras. Aunque lo hago también para comprobar que no ha sido un sueño, que por fin está en casa, y aunque sé que habrá heredado muchos de mis peores defectos, estoy feliz, feliz, feliz...

miércoles, 6 de marzo de 2013

YA VEREMOS


 
Ya veremos, le dice la Sra Encarna a Puri cada vez que ésta le pregunta por la continuidad de su trabajo, si cuenta con ella para la semana siguiente. Con esto de la crisis,  dice la Sra Encarna mientras se desplaza con movimientos torpes por la casa, no sé si me llegará el dinero. Puri se ocupa de la limpieza, de la compra, de la cocina. Ya veremos, dice la Sra Encarna antes de acostarse, antes de tumbarse sobre el colchón bajo el que guarda bien ordenados y en montones esquidistantes, todos los fajos de billetes que le sobrevivirán y que gastará su sobrino en una casa, un coche y una Harley para recorrer mundo.